Por Josep Autet. El año anterior ya habían avisado con un muy buen tercer lugar final, pero nada más iniciar 1972 demostraron que ese iba a ser el año decisivo: Josep Buixeda – Ferran Lecina se lanzaban a por el campeonato. Estamos hablando del título catalán, claro está, algo muy preciado en aquellos años 70 de gran ambiente y afición. Arrancaron temporada con un 5º puesto en el Rally Costa Brava y posiblemente eso y la sana ambición les hizo afrontar un intenso programa en el catalán pero también en el nacional, siguiendo el Desafío Simca.
No contaremos todos los resultados logrados, pero globalmente fueron muy buenos: 5º en el Costa Brava, 6º en el Vendrell-Andorra, 7º en La Lana, 10º en el Luis de Baviera y en el Rioja, etc. En Cataluña vencieron el Rallye 600 (fotos), el Dos Provincias, acabaron segundos en el Tarragona, etc. A final de año, campeones de Catalunya (por delante de Salvador Cañellas), terceros del Desafío Simca (tras “Rizos” Muñoz y “Memo” Suárez) y séptimos absolutos del campeonato de España (primer Simca, justo por detrás del piloto oficial de FASA Renault, Juan García de la Rasilla).
Era tanto el valor que se le daba al título catalán, que el 27 de diciembre de aquel mismo año 1972, Chrysler España organizó un almuerzo homenaje a Josep Buixeda Nonell en el marco del restaurante La Pérgola, en Montjuïc (añorado lugar…). Además, publicidad de la marca con el título de Buixeda lució en prensa y revistas. Todo un logro. Buixeda contaba con la importante ayuda técnica de Fugarolas, concesionario Chrysler en Mataró, que se hacía cargo de la preparación, mantenimiento y asistencia en carrera, así como la colaboración de Llantas Targa, empresa en la que Buixeda llegó a ser director comercial.
En Mataró existía una gran afición y por descontado excelentes pilotos, arropados todos ellos por la prestigiosa Escudería Mataró, presidida aquel año por Joan Bou Llorens. Buixeda fue el primero en demostrar la valía local al adjudicarse el título, pero los méritos ya hacía tiempo que se demostraban con pilotos como Josep Marc Sabater y Valentí Rodón, maravillosos con sus R-8 Proto. Dos años más tarde llegaría otro título catalán con Jordi Cid (que llegó a ir de copiloto puntualmente con Buixeda), también con el excelente Ferran Lecina a su derecha. Jordi Cid Castro protagonizó grandes gestas, algún día tenemos que contarlo. Otro piloto local, Jaume Camps, ganaría en 1980 el Volant RACC, tras haber sido copiloto de los anteriores.
Pero, ¿quién se anima a comentar más cosas de los rallystas de Mataró? ¡Adelante!
Josep Autet
Junio 2023
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