Historia: II GP de San Sebastián, 1924 



Los pronósticos se decantan hacia Mercedes, un cuatro cilindros ayudado del turbo compresor más perfecto que se conoce. Pero nadie descarta a Delage, un auto que se adapta perfectamente a las especiales características del Circuito de Lasarte. También hay quien tiene en cuenta a Sunbeam, que presenta un motor muy rápido llamado a desarrollar las mayores velocidades, aunque el sinuoso trayecto le puede desfavorecer.

Bugatti y Schmid cuentan con pocos adeptos. Los azulinos bólidos diseñados en Molsheim no han cuajado, a pesar de lo admirablemente preparados. En cuanto al Schmid, hasta la fecha poco ha dado que hablar. Posee dos firmas entre los ases del volante, Goux y Foresti, pero este circuito exige tanto hombres como máquinas.

¿Quién ganará? Si hubiese lógica en estas luchas, si la diosa Fortuna no se ensañase y jugase con el sueño y ambición de los hombres, deberían ganar todos. Pero indudablemente habrá un solo vencedor, el que aguante los embates de las curvas de Bazcardo, Urnieta, Hernani y Oriamendi con más facilidad.

Sunbeam aparecía como tercera opción al triunfo tras los pupilos de Ferdinand Porsche, el nuevo director técnico de Mercedes, y los drivers de Louis Delage. Henry Segrave analizó los motivos de las bajas habidas durante la carrera y priorizó la constancia para derrotar a Costantini por 1’25” y al Delage de Morel por 2’30”.

El desarrollo de las 11 ediciones y sus correspondientes carteles se recoge en el libro “Circuito de Lasarte. Memorias de una pasión” de 332 páginas con más de 400 fotografías a gran resolución y del que apenas queda un puñado de ejemplares.

En http://circuitodelasarte.com/index.php están los detalle del libro, sus características técnicas, un resumen de contenidos y la forma de adquirirlo.

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